domingo, 12 de febrero de 2006

Consagración

V. CONSAGRACIÓN


Art. 15. Los CRUSE realizarán su consagración al Señor emitiendo los votos de obediencia, pobreza y castidad.

A) Voto de obediencia

  1. Por el voto de obediencia los CRUSE se ponen totalmente a disposición de la voluntad divina, acatando gozosamente todos los aconteceres de la vida.
  2. Obedecerán, con sumisión y simplicidad franciscana, las disposiciones de la Iglesia, de los superiores propios de la OFS y de los grupos CRUSE. Harán objeto del voto de obediencia, incluso, las disposiciones que no contradigan el querer de Dios y el bien del alma.
  3. Es también objeto del voto de obediencia el cumplimiento fiel de las obligaciones dimanantes del estado y trabajo particular de cada uno.
B) Voto de Pobreza

  1. Por el voto de pobreza los CRUSE, fieles al seguimienmto de Cristo, quién- confiado en el Padre- eligió para sí y para su Santísima madre una vida pobre y humilde, han de buscar en el desapego y en el uso de las cosas una justa relación con los bienes terrenos, simplificando las propias exigencias materiales, sean conscientes, en conformidad con el evangelio de ser administradores de los bienes recibidos en favor de los hijos de Dios.
  2. Con el espíritu de las bienaventuranzas, esfuércense en purificar el corazón de toda tendencia y deseo de posesión y de dominio, siguiendo al Señor "quien vino a servir y no a ser servido".
  3. Consideren los bienes materiales y espirituales como Don de Dios Padre, siéndole agradecidos, colaboradores diligentes y administradores honrados en favor de los hombres nuestros hermanos.
  4. Acepten y reconozcan humildemente sus fracasos y sus limitaciones fisicas y morales,los olvidos y desprecios y "cultiven la mansedumbre que acepta cualquier situación, sin desazonarse ni perder la paz. "(Adm 14).

C) Voto de Castidad

  1. La castidad por el Reino de los cielos es un Don eximio de la gracia de Dios, en cuya virtud los CRUSE han sido llamados por el Señor a manifestar con su vida el admirable misterio de la Iglesia, unida a su divino Esposo, Cristo.
  2. Los CRUSE por el voto de castidad, asumido por el reino de los cielos, signo del mundo futuro y fuente de fecundidad más abundante en el corazón divino, están obligados a observar continencia perfecta en el celibato.
  3. Los CRUSE por el voto de castidad, viviendo en celibato, eligen a Jesucristo como dueño y señor de su amor y a Él entregan su corazón puro y su cuerpo limpio, respetándose y respetando a todas las criaturas en el amor a Dios.
  4. Los CRUSE, conscientes de que tanto más seguramente se guarda la castidad cuanto más vivo y operativo es el amor fraterno, fomenten y cultiven con esmero entrte sí y con los demás hermanos de la fraternidad OFS y Familia Franciscana el amor que nos une a los hijos del Seráfico Padre San Francisco.

VI. FORMACIÓN PERMANENTE


Art 16. Los CRUSE, hecha la consagración, deben continuar su formación durante toda su vida (Formación permanente), a fin de que el seguimiento de Cristo sea cada día y en todo tiempo y lugar más adecuado y seguro, la vivencia de la consagración sea más gozosa y contagiante, y su misión en la Iglesia, en la sociedad y en la OFS sea cumplida y eficaz.

Art 17. Los CRUSE comprometidos con el ejemplo de las enseñanzas de Cristo, siguiendo el entusiasmo de nuestro Padre San Francisco, quien "a pesar de irse descomponiendo sus miembros y muerto ya su cuerpo....... y permaneciendo firme en su propósito de santa renovación, estaba siempre dispuesto a comenzar nuevamente "(1Cel 103), dedicarán diariamente un tiempo a la lectura de la sagrada Escritura, preferentemente del Nuevo Testamento, de la Regla y de las constituciones Generales de la OFS, de los escritos del Seráfico Padre San Francisco y otras fuentes de la espiritualidad franciscana, y de los documentos de la Iglesia, de la conferencia episcopal y de los Ministros de la Orden.........


VII. VIDA DE UNIÓN CON DIOS


Artí. 18 La eucarisría es el sacrificio-sacramento por el que la Iglesia vive y crece continuamente, el memorial de la muerte y resurreción del Señor, el culmen y fuente de todo el culto de toda la vida cristiana, signo de unidad de Cristo con los hombres, de los hombres con Cristo y de los hombres entre sí, vínculo de caridad, banquete pascual, en el cual se recibe el cuerpo y sangre preciocícimos de Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de gloria futura.

Artí. 19 Los CRUSE participen diariamente, si les es posible, en el sacrificiuo-sacramento de la eucaristía, uniéndose al sacrificio redentor de Jesús y en comunión con los hermanos.

Artí. 20 Sepultados y resucitados con Cristo en el bautismo, que nos hace miembros de la Iglesia, los CRUSE, más vinculados a ella por la profesión de la OFS y por su consagración en el grupo, participen en la oración lutúrgica de la Iglesia, liturgia de las horas, principalmente laudes y Vísperas, bien en la fraternidad, bien en la parroquia, bien en particular. El ritual OFS enseña otros modos prácticos y muy valiosos de "hablar" con Dios. Pueden también, rezarse los doce padenuestros.

Artí. 21 Como Cristo fué el verdadero adorador del Padre, así los CRUSE harán de la oración y contemplación el alma de su propio ser y del propio obrar. Los CRUSE dedicarán a la oración y a la contemplación todos los días un cierto tiempo.

Arí. 22 Tendrán un día de retiro mensual y ejercicios espirituales todos los años. Si la OFS los tienen, hagánlos con la fraternidad. Si no pueden hacerlos en el grupo o en la fraternidad, por cualquier causa, hagánlos en privado, entregándose al silencio interior y a la oración más que de ordinario.

Artí. 23 Con ocasión de los ejercicios espirituales, los CRUSE se reformularán anualmente su proyecto o plan de vida con Dios, que presentarán a su director espiritual, si lo tienen, o al padre asistente de grupo, como manifestación y ejercicio del voto de obediencia.

Artí. 24 Los CRUSE amen de corazón la vida sacramental de la Iglesia y aprecien los sacramentos, que nos ayudan a mantener firme el espíritu. Como hermanos de penitencia, recibirán con frecuencia el sacramento del perdón. Leer más